29.4.08

Hagamos pasar piola a APRODEH


Porque si es APRODEH quien le da más que una mano a un grupo terrorista, entonces no pasa de ser un desliz, un error, una lamentable equivocación, a diferencia de cualquier otro actor político que ya estaría pagando muy caro por menos que eso.

¿Qué hacer ante semejante acción?

¿Sólo una alzada de cejas, porque ir más allá es criminalizarlos?

O es más:

¿Nos ponemos todos en la fachada de APRODEH, y los defendemos del "injusto linchamiento" que reciben de las malignas fuerzas de derecha?

Es daltonismo político creer que tomar alguna acción en consecuencia de lo hecho por APRODEH, sea atacar los Derechos Humanos. No se puede ser tan ciego y parametrado, que la sola sospecha hacia una organización con una clara agenda política, sea macartista y no simplemente precaución ante lo obvio. ¿Está mal pensar que hay una estrategia política contraria a los intereses del Estado que mueve a APRODEH?

El Perú no es una maravilla de respeto al ciudadano, pero ver al Gran Hermano vigilándonos porque el ciudadano común se indigna con el escándalo APRODEH-MRTA, o por el caso de Melissa Patiño, es malgastar una metáfora poderosa. ¿Qué nos quedaría entonces como símil si verdaderamente se nos impusiera un fascismo de verdad y no el fantasma que se ve en cada gobierno que no es de izquierda? No podemos esgrimir fácilmente el peligro del Big Brother solo porque la opinión pública ve la verdadera piel a una organización falaz, que usa el manto de los DDHH para objetivos políticos claros, y en este caso, repudiables.

Pero por ser representados por APRODEH y otras instituciones, la causa de los DDHH sí está en peligro como lo mencioné anteriormente en Salvemos los Derechos Humanos:

Salvemos los Derechos Humanos de los Humanos de Izquierda, que le dan un uso político y una aplicación sesgada y farisaica, no importándoles dichos derechos cuando no conviene a su causa, y olvidándose de ellos de peor manera una vez se ubican en el poder, lo que contribuye al debilitamiento de la Declaración.

Salvemos los Derechos Humanos de los Humanos de Derecha, para quienes el idealismo es un concepto deplorable, aquellos que por atacar a sus enemigos políticos intentan quemar al rehén que sostienen en vez de salvarlo, aquellos para los que la vida no gira en torno a una existencia digna sino a una burda competencia de escualos por obtener dinero, en la que una Declaración de Derechos tal sobra si no concierne a los derechos de propiedad.
Me parece que esta circunstancia debe ser el punto de inflexión donde las ONGs de DDHH no sean un feudo exclusivo de comunistas reciclados o peor, guerrilleros frustrados, porque, a pesar de la innegable buena voluntad de escasas excepciones, ya han demostrado un sesgo en la defensa de una causa que merece defensores más imparciales. Por ello, me parece interesante que surjan nuevas instituciones que defiendan los DDHH, pero menos contaminadas y libres de sospechas, menos oscuras y con una carga política menos ideologizada.

Con ese deseo, leo con entusiasmo, lo propuesto por Manuel Enrique, en el blog Lo Justo, Varón, que es lo más sensato que he visto con respecto al escándalo APRODEH-MRTA:
Entonces, ¿qué hacer? Lo vengo repitiendo hace mucho: hace falta una renovación urgentísima en el movimiento de Derechos Humanos. Y si no se puede hacer esa renovación dentro de las mismas ONG (es decir, que sangre nueva y con nuevas ideas entre a dirigirlas), entonces habría que crear nuevas ONG de Derechos Humanos. Nuevas instituciones, que no carguen con los lastres del pasado, y que, sobre todo, zanjen definitivamente y de todas las formas posibles con la violencia y con quienes perpetran la violencia. y que lo hagan sin dejar resquicio alguno.
Si eso se concreta, hay esperanzas. Si hay una generación que realmente necesita ser relevada, es la que está a cargo de las actuales ONGs de DDHH.

Más opiniones encontradas en:

El Morsa: Defensa de APRODEH (¿por qué? ¿sólo fue una chiripiolca?)
Pueblo Vruto: DDHH como instrumento (en el otro extremo del espectro)
Desde el Tercer Piso: El Justo Medio (uhm, ni tan al medio)
Menos Canas: Tropiezos múltiples (¿sólo tropiezos?)
Virtú e Fortuna: APRODEH y MRTA (solo algunas coincidencias con Tanaka)
El Mundo de Plástico: Infame represión (bacán, pero muy orwelliano)

12 comentarios:

Roberto dijo...

¿defender por qué? porque más allá de las personas, está la chamba. creo que es bueno separar la institución de soberón o quien sea. ese es mi punto de vista.

es como que digas la dirigencia futbolística en el perú es malísima, por lo que debes cerrar los clubes y crear otros nuevamente. olvidar el peso que tienen las instituciones, el peso simbólico. o peor aún, decir que el perú deba desaparecer porque sus gobernantes son un desastre y comenzar todo desde cero. tampoco, me parece un poco demasiado.

para mucha gente aprodeh ha significado y significa apoyo, defensa de derechos humanos. y creo que así como se critica el error político se debe también, por justicia de análisis si quieres verlo así, valorar la buena chamba. por ejemplo, la que viene realizando ahora mismo en el juicio a alberto fujimori.

ahora bien, ¿hay un gran hermano vigilándonos? creo que estamos yendo a eso. y no creo que sea necesario tenerlo instalado para recién decir que existe. hay una tendencia jodida a la vigilancia del comportamiento privado, un discurso conservador sobre la vida privada, un discurso mediatizado sobre la expansión de la violencia en las calles. nadie salga de sus casas, nadie haga nada malo en su alcoba. esos parecen ser los mensajes que transmiten los noticieros. exagerado, seguramente, pero es una tendencia.

saludos cordiales,

Fabber dijo...

Hola Roberto, no estoy proponiendo cerrar APRODEH, pero sí tomar medidas, como quizá una vigilancia de la financiación o actividades de esta institución. Las acciones tienen consecuencias y hablan mejor que las palabras y los discursos engañosos. No hay nadie a quien no se pueda tocar con el pétalo de una rosa. Como menciono, por menos que eso, cualquier otro actor público (iglesia, militares, estado, entre otros que sí son cool como blanco) se vería en desgracia absoluta.

Sobre la diferencia APRODEH - Soberón, el post de Tanaka que linkeo habla justamente que no es un "acto independiente" de Soberón con respecto a APRODEH. Además que esa organización no puede jactarse de imparcialidad en su defensa de los DDHH. Tiene un componente político evidente y totalmente desequilibrante desde su fundación. Por esa última característica hay que alentar OTRAS instituciones alternativas pro-DDHH, sin sesgos políticos tan fuertes (y extremistas en muchos casos), que se encarguen de un tema que es tan delicado y que exige no estar sumido en la bruma de sospechosos intereses.

Sobre el Gran Hermano, creo que la figura se usa más cuando hay un Estado activamente totalitario, y en ese sentido el Perú no lo es. Es más, el nivel de arbitrariedades es menor que en los 80s y 90s, ¡hasta podemos hablar de una mejora! (comparativa, claro). Sobre la actitud conservadora del discurso público, me parece que ha sido más fuerte antes, hay un progreso en muchas actitudes. No veo un aumento especial en el énfasis morboso de la prensa sobre la vida privada, la seguridad ciudadana o lo que se hace en la alcoba, a lo mucho ediciones y posproducción más efectista al alcance de la mano.

Saludos, (tenía desactualizado tu link en mi barra, fixed!)

Roberto dijo...

No, de acuerdo.

El tema sigue siendo si se reconoce que algo de chamba buena ha habido, más allá de los sesgos políticos de los directores de estas organizaciones. Y además sesgos que dentro de un enfoque liberal pueden tener.

Yo no estoy tan seguro que las ONG's de DDHH hayan tenido un componente totalmente desequilibrante desde su fundación. Sí creo que varios de sus miembros fundadores vinieron de una experiencia política que los marcó y marcó su posterior accionar. Puedo discrepar harto de esa experiencia política, pero, nada, veamos las cosas que se hicieron y hacen.

Caso concreto: Gloria Cano de APRODEH viene trabajando con las víctimas de La Cantuta y Barrios Altos. ¿Cuál es nuestra responsabilidad política en este contexto? ¿Reconocemos la chamba de la institución? ¿O decimos, no, APRODEH, vamos a vigilarlos? ¿Vigilarlos?

Yo no creo que hayan cometido delito alguno, no creo que la carta sea tan inexacta. Es completamente discutible, pueden tener razón o no, pero poco importa. El tema es que fue políticamente inoportuna, torpe, metida de pata. No es "Pro-MRTA", como dice la Valenzuela. Dice que el MRTA, reconocida organización terrorista, no tiene presencia en el país desde hace 8 años. Que hay una persecusión política a ciertos opositores y se va a usar el argumento del MRTA vigente para perseguir y asustar.

Lo de la vigencia del MRTA no lo sabe Alan García, menos lo va a saber Soberón. Es cierto que se persigue gente con el pretexto del MRTA y es cierto que el MRTA es una organización terrorista. ¿Dónde está el problema? En el tiempo y contexto de la carta, y en el planteamiento del problema.

Y justamente tu carta apunta a lo que yo pensaba. Que ciertas circunstancias pueden justificar terminar algunas libertades sociales y políticas.

De nuevo, ¿vigilar a APRODEH? ¿Por qué?

Fabber dijo...

Más bien, con las razones planteadas ¿por qué no? ¿qué tiene de especial que no pueda ser investigada como cualquier otra institución involucrada en un escándalo? ¿Por qué no puedo auditar los fondos de una organización que se ha convertido en un actor político interviniente y con una acción contraria al interés nacional?

Roberto, quienes defienden una causa tan alta como los DDHH, no pueden permitir ser sesgados en su vigilancia. Minimizas el tema al reducir el componente político de APRODEH a solo una experiencia previa. El ingrediente político es lo principal de APRODEH, y es uno de representatividad hiperminoritaria, que se ha arrogado varias veces y de manera falaz la representación de "la sociedad civil", de una estructura no-democrática sino burocrática, y que, desde su creación en 1983, ha tenido en su mira solo aportar pruebas para condenar al actor estatal, y nunca se le ha visto activamente aportando pruebas contra el principal asesino de la guerra interna, más allá de pronunciamientos vanos que se desdicen con sus acciones, por ejemplo la última con la UE.

Ojalá en los 80s APRODEH y similares hubieran estado buscando activamente meter a la cárcel a violadores de DDHH como senderistas y emerretistas, quizá eso hubiera evitado una excusa para las medidas autoritarias de Fujimori en los 90s.

Entonces, no es interés por los DDHH, es interés por los DDHH de quienes convienen a mi agenda política, y de paso, a mi economía.

Entonces ¿merecen los DDHH estar ahora en la picota, ser motivo de desprecio, burla y subestimación solo por que un grupo de guerrilleros wannabe que no alcanzaron a coger su rifle en los 70s, fundaron una organización rentable POLÍTICA Y ECONÓMICAMENTE para sus propios intereses?

¿Qué es mejor defender? ¿APRODEH? ¿O los Derechos Humanos?

Escojo lo segundo, los primeros han dañado muchísimo a esta causa y la han convertido, para muchos, en sinónimo de instrumento político. Si seguimos así, los ideales consagrados en la Carta de los DDHH se debilitarán aún más.

Necesitamos instituciones nuevas que defiendan los DDHH. Las de ahora han perdido todo crédito, en especial, APRODEH.

Roberto dijo...

"Ojalá en los 80s APRODEH y similares hubieran estado buscando activamente meter a la cárcel a violadores de DDHH como senderistas y emerretistas, quizá eso hubiera evitado una excusa para las medidas autoritarias de Fujimori en los 90s."

Pero es que, a ver, se confunden funciones. Estoy de acuerdo, en el imaginario debió hacerse algo para que no quede esa idea de "dónde estaban las ong's para defender los derechos humanos de los policías".

Yo veo que aquí las ONG's hicieron lo que el estado debió hacer pero no hizo: Defender a la población del abuso del estado mismo. Es decir, si alguien tenía una denuncia de un hijo desaparecido y en la fiscalía te decían ve a otro lado ¿a dónde más iba a ir? En la fiscalía solo admitían casos de crímenes cometidos por SL y no del Estado. Allí fue delimitándose cada función.

Creo entonces que hay un problema de análisis, de perspectiva.

Saludos

GUILLE da MAUS dijo...

La cosa es que APRODEH como las otras ONG tienen sus intereses políticos. Esto es legítimo, pero el problema está en que, lejos de reconocerlo, buscan enmascararlo con un principismo políticamente correcto.

Por eso nunca hay un verdadero debate sino un intercambio de dimes y diretes que permite que las ideologías subversivas alimenten nuevas formas de hacer violencia. Por eso los DDHH no son respetados como deberia, sino que se convierten en instrumento político para otros fines.

Fabber dijo...

Hombre, creo que va más allá de un asunto de imaginarios, mucho más allá.

No digo que no deban ver los abusos del Estado:

¿pero SOLO los abusos del Estado?

¿en plena guerra interna con un enemigo especialmente sangriento y que cobraba más víctimas día a día?

¿y con los terroristas saliendo libre de polvo y paja en cada juicio en los 80s? (con ayuda, incluso, de ONGs, bajo el rótulo de "presos políticos")

¿No había allí una situación judicial injusta con violadores de DDHH que obtenían impunidad? Ante la falla del EStado en meterlos a la cárcel ¿qué hacían las ONGs?

¿no sabían que un terrorista bien metido en la cárcel podía significar una decena de víctimas inocentes menos? ¿o más?

¿por qué solo mostraban vehemencia
contra unos violadores de DDHH y contra otros no?

¿sabes con cual bando no mostraban voluntad ni vehemencia?

¿no era el bando que era ideológicamente incorrecto atacar?

¿no era el bando que no podría, en caso de ser condenado en algún tribunal internacional, pagar reparaciones civiles de las cuáles obtener una tajada?

Son preguntas relevantes.

La respuesta a todo esto es: más que defender DDHH, fue la defensa de intereses políticos y económicos.

Saludos.

Roberto dijo...

Pero te digo, en la comisaría la población denunciaba a SL y apuntaban la denuncia. Cuando denunciaban al Ejército les decían que se fueran. Así ocurrió. Entonces, acudían a las ONG's para denunciar lo que no podían hacer en las dependencias del estado.

La realidad es más compleja que eso, pero allí tienes más o menos respuestas a los hechos.

Yo estoy de acuerdo, sin embargo, con muchas críticas que se la hace a quienes dirigen algunas ONG's. Falta de deslindes, no ser más tajantes con el terrorismo, principistas, etc. Totalmente de acuerdo.

El problema está que esta crítica puede justamente caer en los mismos errores que se señalan: Falta de deslinde con el discurso macartista, no ser más tajantes con el autoritarismo, principistas, etc.

Ver las cosas de manera relacional. Eso falta.

Saludos y lo dejo allí a la espera que más gente intervenga.


Ahora, creo que metes varias papas con camotes en el saco. Las "ONG's" no sacaron libres a la gente de SL.

Fabber dijo...

Roberto, tienes razón en que la realidad es más compleja de lo que alcanzamos a bosquejar en esta discusión, aún así, sigo considerando válidas las preguntas que dejé más arriba.

Sobre lo último, por apelar solo a mi memoria de repente caigo en una inexactitud. Recuerdo a "Abogados Democráticos", creo que eran una ONG (?) que al final resultó ser un organismo de fachada. Ojo, lo de APRODEH no va por allí, pero sí por el lado de los otros cuestionamientos.

Guille, sé que estás convencido que los DDHH son un instrumento, pero justo para alejar esa imagen y devolver la vida a ese conjunto de ideales que son un marco ideal para la convivencia humana, debemos evitar identificar ciertas instituciones con los DDHH y alentar otras, menos cuestionadas.

Unknown dijo...

Si bien es cierto que hay cierta ambiguedad en las posiciones de algunas ONGs de DDHH, me parece bastante injusto censurarlas por centrarse en la acción del Estado. Por varias cosas:
- Quien estaba oficialmente comprometido con defender los DDHH de la población era el Estado. Dar seguimiento a ese compromiso es un trabajo totalmente distinto a perseguir a grupos insurgentes
- La situación era que tenías a dos bandos violando DDHH. Un bando era perseguido por el Estado, el otro era defendido por el mismo. Mientras el primer bando era oficialmente repudiado (con justa razón), nadie estaba denunciando a este segundo bando. Nadie. ¿No te parece lógico centrar tus limitados recursos en hacerlo? El Estado tenía una maquinaria para defenderse y hacer cumplir la ley; las personas que sufrían violaciones de parte del Estado no tenían nada. ¿No era éticamente adecuado acudir a estas personas?
- Enfrentarse a un grupo armado terrorista corresponde al Estado, el cual tiene posibilidades de defenderse de un contraataque (monopolio legal del uso de la fuerza creo que le dicen). Mientras más te enfrentas a estos grupos más expuesto estás a su venganza. ¿Crees que el Estado iba a dar resguardo a las ONGs en un caso así?

Estoy seguro de que hubo y hay muchos errores de lectura por parte de la izquierda peruana, pero me parece una distorsión muy grande dar a entender que el no cerrar filas con el Estado implica apoyar a los terroristas. Es ver las cosas en blanco y negro.

Por último, si no interpreto mal, cuando Roberto dice "Las "ONG's" no sacaron libres a la gente de SL." se refiere a que no fueron "las ONGs" como una entelequia que abarca a todas las organizaciones. Por supuesto que hubo ONGs de fachada de sendero, como también hubo y hay ONGs de fachada de la DEA y de muchas cosas más. Pero precisamente invocarlas como ejemplo viene a ser mezclar papas con camotes.

Edgar dijo...

Amigo Litio, yo tb soy enemigo de los blancos y los negros, pero creo que en una guerra o estas con unos o estas con los otros. Y si en esa guerra esta en juego la supervivencia del Estado como tal, todos teniamos que cerrar filas en contra del terrorismo.

Claro que esto no implica hacerse de la vista gorda y pasar por alto los abusos. Pero creo que para ello existen momentos y formas de hacerlo. El problema es que estas organizaciones sobredimensionaron en muchos casos el papel del Estado, presentandolo como el principal violador de los DDHH cuando en realidad eran otros quienes lo eran.

Ahora, tb creo como Roberto que justamente el papel de defensores de quienes fueron victimas del Estado tenía que caer en estas organizaciones porque en esos años entablar una denuncia por los crimenes cometidos x el ejercito, x ej, era casi imposible. Pero el tema aqui mas importante para mi fue el papel que estas organizaciones desempeñaron despues de terminado el conflicto. Y en este punto repito lo dicho anteriormente: exageraron el papel del Estado presentandolo como violador de los DDHH y muchas veces salieron a defender causas como las reparaciones civiles para terroristas, la reciente carta al parlamenteo de la UE, etc.

Por otro lado, coincido con Fabber que se necesitan nuevas organizacions de DDHH porque estas que tenemos, creo yo, son remanentes de esa polarizacion que se vivio en el Perú durante la epoca del terrorismo. Ahora, te dejo unas preguntas estimado amigo: ¿Tenemos personas que puedan asumirla? ¿Como hacerlo en un país tan polarizado como el nuestro? ¿Como hacerlo si las principales facultades de ciencias sociales desde las cuales deberían salir estas personas, tienen inevitablemente un sesgo?

Anónimo dijo...

No creo que el debate sobre lo que hizo APRODEH o su metida de pata que revela un sesgo politico de comprension para con estos "guerrilleros que se enviciaron con el uso del terrorismo" (...) al cual no es ajeno ni el mismo partido de gobierno, o su tontisima manera de prevenir que se eviten protestas pacificas, sea algo que se achaque a toda ONG, hay muchas y de muchos tipos e intereses