25.9.08

El epílogo en video de George W.Bush



Y de esta manera termina el mandato del cuadragésimo tercer Presidente de los Estados Unidos, George Walker Bush. Recibió de las manos de Bill Clinton una nación en la cúspide de su poder histórico y la devuelve, ocho años después, diciendo adiós con esta frase:

"Our entire economy is in danger".

Nunca, en toda su historia, Estados Unidos hizo tanto en tan poco tiempo para ganar tantos puntos en contra: la guerra de Irak, la suspensión de libertades constitucionales, la construcción de un nuevo Muro de Berlín en la frontera con México, la enemistad buscada con Rusia, la arrogancia de poner a todas las naciones del mundo en un "con o contra nosotros" o el desprecio por tratados firmados en materia de desarme, justicia y medio ambiente.

Bajo George W. Bush han prosperado términos perniciosos y geopolíticamente tendenciosos como "eje del mal", "estado fallido", "núcleo integrado y periferia desconectada" o "vieja y nueva Europa". En su período la guerra ya no necesitó pretextos ideológicos como en Corea o Vietnam, solo sed de petróleo y de jugosos contratos como los del corrupto Dick Cheney y su empresa Halliburton. La estupidez megalómana neocon disfrazada de estrategia acabó por enterrar la imagen que los EEUU se habían forjado en la Primera y Segunda Guerra Mundial, convirtiéndolo de gendarme a principal peligro para la paz mundial. Mientras instituciones científicas como la NASA veían cada vez más reducido su presupuesto, aumentaba el destinado para desarrollar armas nucleares de "mediana potencia" cuyo uso pueda posicionarlas bajó el umbral del tabú atómico internacional y poder usarla como amenaza efectiva contra otros países.

Nieto del sucio magnate del petróleo y senador, Precott Bush, e hijo del Skull & Bones, director de la CIA y cuadragésimo primer presidente George H. W. Bush, Georgie Walker cierra el ochenio de su gobierno superando a su linaje y concluyendo la saga nefasta de los Bush que acompañó parte de la historia norteamericana en el siglo XX.

Dice mucho la mirada angustiada frente a las cámaras en un último mensaje donde confiesa que ha tenido que traicionar sus principios fundamentalistas acerca del mercado para proponer, casi rogar, al Congreso norteamericano el desembolso de 700 mil millones de dólares, suma de dinero sin parangón en la historia para un gasto de ejecución tan rápida. Frente a cámaras, le faltan palabras para explicar que el precio del rescate de una economía secuestrada y succionada por un manojo de lampreas le costará más de 3 mil dólares por cada hombre, mujer, niño, anciano, recién nacido y moribundo que habita la Unión norteamericana. Seis años atrás el mismo Bush animaba al estadounidense a gastar y comprar todo lo que pudiera en los malls, a endeudarse, casi a sobregirarse. Ahora le anuncia a la misma población, que la fiesta se acabó, que hay una cuenta enorme y que lo siente, pero él ya se va y que lo arregle otro.

Casi casi me pareció ver a Hurtado Miller en 1990 cuando anunció el fujishock. Solo faltó la frase "Que Dios nos ayude".

4 comentarios:

Silvio Rendon dijo...

Hola Fabber,
Las medidas económicas ya se han tomado la semana pasada. El asunto ahora es comunicarlo a la ciudadanía. En este contexto se inscribe el mensaje de Bush, que por lo demás es un mensaje más de tantos que se vienen dando y no ha dicho nada nuevo. Más importante fue la comparecencia en el congreso de Bernanke y Paulson, que ayuda a que los congresistas apoyen el "bailout" (que no lo es en realidad) y lo expliquen a sus votantes. El tema ahora es conectar a Wall Street con Main Street.
Saludos,
S.

Fabber dijo...

Hola Silvio.Creo muy importante este mensaje de George W. Bush no solo porque políticamente sirva para presionar al Congreso o porque destape algo nuevo,sino por su valor histórico, como el oscuro final de un gobierno perjudicial tanto para su país como para el mundo. Da escalofríos, como ciudadano de un mundo económicamente interdependiente, ver al presidente de los EEUU imposibilitado de dorar la píldora a pesar de todos sus asesores de imagen, lo que da una idea de la grave situación actual y los riesgos mayores que no se están conjurando tan fácilmente como parecía la semana pasada.

La crisis se ha manejado mucho mejor para que no se convierta en otro 1929, dada dicha experiencia previa, pero tengo la impresión que tanto el billonario rescate a aprobarse en el Congreso y las tardías medidas de control implementadas rápidamente en estos días no son el punto final de este crítico episodio.

Anónimo dijo...

El problema no es solo de lampreas engullendo la economia americana, es estructural.

Hoy en día USA ya no es el productor y proveedor de capitales que fue en los 50, sino un inmenso agujero negro de recursos de todo tipo, una economía gastadora, sobregirada, cuya única fuerza ha sido el emitir la moneda base de la economia planetaria.

Esta crisis se va a profundizar pero USa descubrira con asombro que el resto del mundo saldra del hoyo más rapido que ellos y el dolar sera progresivamente abadonado como lo fue la libra esterlina.

Un USA en crisis no podrá mantener el nivel de gastos militar actual, este depende intimamente de la economía y si no hay plata, no hay como producir y mantener los tanquecitos y buques en todos los rincones del globo.

Huntington imaginaba en choque de civilizaciones como una guerra aceleraria la caida de USA como megapotencia, eso ha sucedido pero no con China sino con Irak y el medio oriente.

Cuando Osama se cargo las torres gemelas calculo bien, de verdad ha derribado el poderio americano, por una decada al menos.

Fabber dijo...

Hola Droper, a mi parecer Osama aceleró un proceso que pudo haber tomado décadas. Los EEUU estaban en una posición de dominio mundial y gran prestigio como modelo económico y político hasta el 2001.

La reacción neocon a este acontecimiento, donde se sumaron tanto una concepción geopolítica verdaderamente imperial junto con intereses económicos particulares con mayor poder de cabildeo en el Ejecutivo, forzaron la maquinaria norteamericana, que tenía que manejarse con cuidado y no como el tanque invencible que creyeron sus líderes. Estrellaron a los EEUU contra todo lo que podían, creyéndolo uno de esos camiones Big Foot de sus espectáculos de demolición. El Big Foot ahora está bien dañado.

Ciertamente, los EEUU de los 50s han muerto, en tanto potencia mundial que dominaba casi la mitad del comercio y la economía internacional, como faro de empresas atrevidas como la llegada del hombre a la Luna. Un mundo unipolar se asomó en 1989 con la caída de la URSS, pero ese período unipolar está resultando sorprendentemente breve. Un mundo multipolar se aproxima, pero aquí tampoco todo es rosa con el progresivo alejamiento de los EEUU como poder indiscutible. Ya lo mencionaré en un post al respecto.

Saludos.