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26.2.10

La trica de Avelino Guillén

Si se lanzara la campaña "Adopta un periodista", no sabría por cual decidirme. Porque las demostraciones de juicios a priori y análisis de cinco segundos pocas veces quedan tan en evidencia como en el rápido coro de voces "indignadas" por la desaprobación del fiscal Avelino Guillén en la evaluación para el puesto de Fiscal Supremo.

Aún cuando para fortuna de Guillén, lo coyuntura lo cruzó con un escándalo en el Consejo Nacional de la Magistratura, el organismo encargado de su evaluación, los argumentos de "complots de la corrupción",(cuando por ejemplo el juez Hugo Príncipe, que condenó a Fujimori, pasó la prueba) o "errores en la forma de evaluación" quedan expuestos como vampiros a la luz solar cuando se presentan evidencias como ésta: su examen publicado por el CNM junto al del fiscal Gálvez Villegas, que encabeza en puntaje las evaluaciones.

No hago ningún spoiler si adelanto que Guillén, tras su segunda evaluación jalada, con justicia se va por la "trica" en su carrera al puesto de Fiscal Supremo, porque su conato de renuncia al Poder Judicial quedó como una payasada mediática más. No basta ser histriónico y comportarse como un "Comisario del Pueblo" en un megajuicio televisado, y así convencer más a los profanos que a los enterados, para ocultar las deficiencias profesionales.

Invito a Gustavo Gorriti, Rosa María Palacios o Augusto Álvarez Rodrich (entre otros, siguen firmas) a que los lean, los evalúen y pidan consejo a abogados amigos suyos para sacar sus propias conclusiones. Y después, no hace falta ser adivino para saber que en su mente surgirá una respuesta a la pregunta:

¿Está probado que Avelino Guillén rindió mal su examen para Fiscal Supremo por segunda vez?

Sí. Lo está.

21.9.07

La Segunda Venida de Fujimori

¿Estamos preparados?

Lo digo porque a pesar que me incluyo en el grupo de quienes creen que Alberto Fujimori merece ir a la cárcel por una serie de delitos, no me considero dentro de la facción que considera este evento como la cacería de un nazi exiliado. Fujimori debe responder por una serie de delitos concretos y tenemos que remitirnos a las pruebas que se presenten, más allá de lo autoritario que fue su gobierno o de lo hipócrita y cínico que resulta ser este personaje, aunque eso sea una característica que comparta con tres cuartas partes de los políticos y que se nos haga más insoportable por esa sonrisa ladeada que tuvimos que soportar diez años.

Fujimori debe ir a la cárcel, pero no con la justicia de la turba. Debe ir preso por casos concretos como los 15 millones de Vladi, la CTS más cara del mundo o por la interceptación telefónica. Imputarle la responsabilidad penal última de La Cantuta y Barrios Altos puede jugar en contra. Si pueden librarse unos segundos de años de "últimas verdades" estilo Aprodeh, quizá me entiendan un poco más.

Fujimori debe ir preso de tal manera que no se convierta en un prisionero político juzgado más con la entendible pero irracional pasión de la venganza, sino que se convierta en un reo común, tras las rejas después de un proceso impoluto. Quiero creer que por una vez en la historia de la nación podamos aprovechar esta magnífica oportunidad para poner las cosas en su verdadera dimensión, poner en verdadero juicio a un ex-presidente del país y dar el ejemplo de no caer en los extremos donde oscila tristemente el pensamiento peruano clásico, la facilidad del pulgar del César que sólo conoce arriba o abajo, binario, simple y primitivo.

El Poder Judicial de Chile nos ha dado un ejemplo de ecuanimidad e independencia con este fallo. ¿Nuestro Poder Judicial podrá hacer un esfuerzo y prescindir de presiones políticas para escribir uno de los pocos buenos capítulos de nuestro país, que nos hacen falta? Así lo espero, por ingenuo que suene.

Para conocer interesantes visiones del caso:
Útero de Marita de Ocram
Pueblo Vruto del Ratón Guille
Desde el Tercer Piso de J.A.Godoy
El blog del Morsa
Fantomas