1.1.07

2006: el Plot Point

12 meses demasiado intensos para resumirlos en un post, pero que han resultado como una suerte de pico dramático en mi vida. Muchas cosas acabaron de súbito, sobre todo las relaciones de pareja. No solo fue mi caso, sino una cadena interminable de amigos y amigas que han terminado relaciones de más de 5 años. En el 2006 le mandaron un Terminator a Cupido.

Bodas inesperadas, grandes sorpresas, proyectos megalómanos que comenzaron a concretarse, trabajo duro, la maestría en Ciencias Políticas y el volver a pisar el campus de la Universidad. Nuevos amigos y nuevas y frescas ideas. Crecimiento, aprendizaje, y despedidas ¡cuántas! me cansé de mover la mano y de girar la cabeza para ver el avión alejarse: Bertha, Carla, Álvaro, Roberto, Chío, Alicia, Torsten, Mikel, Chris, Ángela, empacaron y mudaron sus cachivaches del Perú, algunos por una buena temporada y otros para siempre.

Mi asociación del rol pasó una lluvia de crisis Seldon y el canal 7 donde trabajo pasó un año de paranoia laboral, resucitaron planes dormidos que prometen un futuro glorioso, comencé a aprender un idioma nuevo y nuevas formas de pensamiento ¡Algunas demasiado extrañas, pero que abrieron la mente al color del mundo! Viajé después de mucho tiempo y la experiencia fue única. Me reencontré con viejas amistades, y redescubrí otras que siempre habían estado allí. Hubo menos juego y vicio de lo que deseé, más gastos de los que pensé y más comida de la que podía caber en mi barriga. El alcohol y la juerga siguieron dando saldos desconcertantes y volví a habitar las mañanas donde los pájaros cantan anunciando que otra vez te pasaste de vueltas.

Cree nuevas obras. Pude volver a hilar historias. Reordené mi vida. Hice un zoom back y vi muchas cosas desde una perspectiva lejana.

¡Las noches!

Una en que mi hermano y yo, vimos claramente un platillo volador. En otra, canté Fly me to the Moon por las mejores razones. Otra más fue testigo del peor llanto y arrebato de tristeza de mi vida, solo. En una ocasión más, a las 3am sentí la epifanía del mundo encerrado en mi habitación y puse todos mis planetas en órbita. Me dio un ataque de ceguera a las 11pm en un espectacular concierto de Santana. Enseñé el himno nacional a un par de australianas. Cerré juergas monstruosas con un jugo de fresa a las 7pm. Descubrí mi salsa parrillera ideal en El Bosque. Volví a enviciarme en lecturas madrugadoras hasta el amanecer. Descubrí a Sloterdikj y Robot Chicken justo antes de pegar un ojo en la cama. Me pegué con las series piratas compradas en DVD. Elfen Lied, Basilisk, Samurai Champloo, Lost, Battlestar Galactica, Dr.House, y más.

Finalizando el año, hoy 31 me libré de ser asaltado por dos ladrones, le molí la cara a uno y le gané la moral al otro, evitando que me robaran un celular misio pero con gran valor sentimental. Yo reaccioné simplemente por indignación, creía que me iban a sacar la mierda pero no podían llevarse ese celular gratis. La fortuna (porque ignoraba si llevaban navaja o algo peor) y la adrenalina sonríe a veces en caso de necesidad y este fue uno de ellos. Sin artes marciales, esquivando golpes y pegando a lo bruto, más berserker que técnica o maña. No es mala forma de acabar el año

El 2006 también inicié un blog.

El último día del año se me dio por contar cosas personales.

Y finalmente descubrí el You Tube. Feliz año Nuevo ¡y que disfruten de un Neverending Party!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu 2006 se parece a mi 2005 sazonado con pedazos de 2004. Arriba los proyectos megalomanos.. Viva la utopia del futuro glorioso!!!